Tanto por la puerta de Toledo, como por la iglesia de la Merced, sería difícil imaginar un presente sin la historia de aparejadores y arquitectos técnicos en Ciudad Real. Muchos de los beneficios directos de vivir en una particular región provienen directamente de su arquitectura.

Pero este es un trabajo complejo. No solo es importante una arquitectura de alta consideración organizacional, sintética y materialista, sino que además debe crear soluciones creativas y estéticas al crecimiento de la población. Durante el pasado siglo se ha formado una importante emigración rural a zonas urbanas, de creciente necesidad arquitectónica.

Por ello, es necesario contar con el trabajo de aparejadores y arquitectos técnicos en Ciudad Real con las adecuadas reflexiones sobre los distintos elementos de su profesión. Ellos se encargan de promover los valores tecnológicos y humanitarios que vigorizan, mantienen y promueven el crecimiento de la ciudad.

Son muchos los ejemplos encontrados en Ciudad Real. Sitios como la plaza mayor ofrecen un importante espacio como lugar de actividades públicas y participación social. La urbe gótica planificada por Alfonso X el Sabio proporciona una expresión de nuestros valores humanitarios que se mantendrá en el tiempo, para estudio de nuevas generaciones.

El Museo Provincial nos permite mirar nuestro medio ambiente y alrededores de nuevas maneras. La Catedral de Santa María del Prado nos muestra la verdadera fuerza de una sociedad unida.

La buena arquitectura no solo es entretenimiento o estética, sino que debe cumplir las necesidades y estructuras del plano urbanístico de la ciudad y sus habitantes. Debe mantener, como dijo el ingeniero Vitruvio en el año 30 antes de Cristo, "la firmeza y la alegría."

Tarea tan compleja debería ser dejada en manos expertas, como las de Proyectos Técnicos Integrales Molinero, S.L. Nuestro equipo garantiza el conocimiento legislativo, la experiencia, y la destreza para el mejor desarrollo de proyectos. Queremos construir el mejor futuro.